Para el cuidado de las rosas si la temperatura baja de los cero grados hay que envolverlas o encapucharlos para protegerlos. Ponerles acolchado es otra buena opción, para que los cambios drásticos de temperatura no les afecten. El acolchado puede estar formado por hojas secas, agujas de pino o corteza vieja. Las ventajas son numerosas: suelo más fresco en verano, mantiene la humedad y evita la deshidratación, reducción de los cambios bruscos de temperatura y bloqueo del crecimiento de malas hierbas. Una forma de encapucharlos puede ser con contenedores que no sean de plástico, preferiblemente de color blanco y que dejen pasar el aire para que el rosal respire. Si es necesario podaremos los rosales para que quepan dentro de esos contenedores. Juntamos las ramas altas y las atamos con una tira de media de nylon para que el rosal no se mueva. Luego ponemos sustrato alrededor de la planta. A continuación, la cubrimos con acolchado que puede ser de hojas secas. Estas hojas las colocamos entre las ramas y tapamos el rosal con el contenedor. Por último, hacemos 4 agujeros al contenedor para que la planta respire. Así como estos datos de cuidados para las plantas, existen muchos, y los puedes consultar haciendo clik en nuestro enlace web .